¿Estás Ahí? (2011)
Cari del más allá.
Si la finalidad de una comedia es arrancar, como poco, una sonrisa al respetable, la película de Roberto Santiago fracasa estrepitosamente en sus intenciones. Basada en un obra teatral de Javier Daulte (desconozco si su versión es más graciosa que esta), la cinta narra la anodina historia de Ana y Fran, una pareja que acaba de mudarse al apartamento donde pensaban vivir juntos. Solo que Ana, fallecida en un accidente de tráfico, lo hace en forma de fantasma. La muchacha se resiste a aceptar su nueva condición de espíritu, a la vez que conoce a otro fantasma llamado Claudio, que también deambula por el piso. Ana no quiere que Fran pase página y saboteará todas sus oportunidades de conocer a nuevas chicas.
Las peripecias de la pareja, interpretada por Gorka Otxoa (“Pagafantas”) y la televisiva Miren Ibarguren, son lineales y previsibles; ningún gag acaba de cuajar y la comicidad brilla por su ausencia. La trama avanza a trompicones y por momentos se atasca de tal manera que los escasos ochenta minutos del metraje se llegan a hacer largos. Las referencias a títulos como “Ghost”, “El Sexto Sentido” o “El Exorcista” no pasan de la mera anécdota cinéfila carente de gracia y la indecisa deriva dramática que adquiere la película en determinados pasajes tampoco acaba de funcionar, resultando en un intento casi tan forzado como el recurso al mundo de la magia y el ilusionismo para incorporar con calzador un par de escenas supuestamente cómicas. La cinta de Roberto Santiago se desinfla tanto en su recta final que acaba entregada al meneo facilón de pechuga.
Manu Castro
@ManuCastroLSO
(21-09-2011)
Título Original: ¿Estás Ahí? | Género: Comedia, Fantástico | Nacionalidad: España | Director: Roberto Santiago | Actores: Miren Ibarguren, Gorka Otxoa, Miguel Rellán | Productor: Ibón Cormenzana, Gonzalo Salazar-Simpson | Guión: Javier Daulte, Pablo Fernández Vázquez, Roberto Santiago | Fotografía: Joan Benet | Música: Zacarías M. de la Riva | Montaje: Ángel Armada
Sinopsis: Fran y Ana acaban de mudarse a vivir juntos y se encuentran con las dificultades habituales de cualquier joven pareja que está empezando: la convivencia, las manías personales, los celos… Sólo que, en su caso, hay que añadir un pequeño detalle: Ana está muerta y en realidad es un fantasma. Además, no es el único en la casa…
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