Quantum Break (2016)
El fin absoluto del tiempo.
Dejando atrás los retrasos y las polémicas –aunque el tema de la enigmática resolución 720p 4xMSAA aún escuece un poquito–, el que os escribe tenía muchas ganas de jugar a esta nueva propuesta del estudio Remedy Entertainment, los tipos responsables de “Max Payne” y “Alan Wake”. Las expectativas eran altas, por supuesto, los antecedentes inmejorables y la premisa de “Quantum Break” algo más que intrigante. La acción transcurre en la ficticia Universidad de Riverport, una localidad situada en el noroeste de los Estados Unidos. Jack Joyce (Shawn Ashmore) acude a una cita nocturna con un buen amigo de la infancia, Paul Serene (Aidan Gillen) –fundador de la empresa Monarch Solutions–, que parece necesitar su ayuda de manera urgente. Una vez allí, en las instalaciones de investigación del departamento de física, Paul revela a Jack la existencia de una máquina del tiempo diseñada por William (Dominic Monaghan), hermano de Jack. La sorpresa inicial se transforma en alarma cuando Paul le informa sobre la inminente catástrofe que se cierne sobre el mundo entero: un experimento de viaje temporal ha salido mal, causando un desgarro en el continuo espacio-tiempo. Las consecuencias de este suceso son inimaginables. De manera colateral, Serene ha adquirido una serie de habilidades –extraños poderes que le permiten sortear ciertos aspectos de nuestra realidad física–, y junto a ellos guarda un terrible secreto: la fecha exacta del fin del tiempo.
Acción en tercera persona a través del tiempo. De sabor agridulce podría definir mi experiencia con este juego. Estamos ante TPS de manual, sin apenas novedades, con mecánicas de juego sencillas y escasa variedad de enemigos. Pasamos con cierta desidia por pantallas de plataformas, salpicadas de puzles muy básicos, a otras donde imperan intensos tiroteos de acción más o menos entretenida. Los poderes del protagonista (Jack adquiere las mismas habilidades de Serene) aportan un toque interesante a estos enfrentamientos; resulta muy práctica la posibilidad de parar –o ralentizar– el tiempo cuando una bala se nos acerca en rumbo de colisión con nuestro cerebro. A nivel de jugabilidad es un título más que correcto, con un control pulido y un diseño de fases llamativo. Pero lo cierto es que “Quantum Break” no pasaría del “bien, pero puede hacer mucho más”, si no fuera por su adictiva trama. El argumento se organiza siguiendo el esquema de una serie de televisión. Las secuencias interactivas y las cinemáticas creadas con el motor gráfico del juego, se combinan con un puñado de clips de vídeo (de unos veinte minutos de duración) que van desarrollando una historia plagada de golpes de efecto y meritorios cliffhangers. A lo largo de la aventura tendremos que tomar ciertas decisiones, será durante unos incisos dramáticos denominados «nudos», que afectarán al desarrollo posterior de los acontecimientos.
El nivel técnico de la propuesta es alto, a pesar de algunos fallos gráficos y la decepción por no poder disfrutar de él a 1080p –aunque Microsoft y Remedy nos vendan la moto de la reconstrucción temporal de cuatro frames previos a 720p–. A pesar de ello, sus mayúsculos valores de producción nos garantizan un espectáculo audiovisual competente y, en ocasiones, asombroso. El diseño de algunas localizaciones y la expresividad facial de los protagonistas inciden en este punto. No se puede negar que “Quantum Break” cumple como superproducción triple A, ofreciendo al jugador un título vistoso, divertido y sólido, con todo el oficio del que son capaces los finlandeses de Remedy, pero este proyecto no consigue el nivel de inmersión de sus obras anteriores, destacando entre ellas los ya citados “Max Payne” y, sobre todo, el magistral “Alan Wake”. Incluso si nos dejamos arrastrar sin reserva alguna hacia este maremagno de paradojas temporales, abandonándonos por completo al disfrute lúdico más básico, son escasos los momentos en los que se desvanece la desconcertante sensación de estar haciendo muy poco dentro de este universo de relojes rotos.
Manu Castro
@ManuCastroLSO
(25-09-2016)
• Lo mejor: Los protagonistas. La trama nos atrapa desde el primer momento.
• Lo peor: Las paradojas temporales daban para mucho más. Escasa sensación de interactividad en algunas fases.
¿Sabías que…? No es la primera vez que Remedy Entertainment experimenta con las posibilidades de alterar la línea temporal de uno de sus juegos. Pudimos disfrutar un planteamiento similar, aunque mucho más primigenio, en el destacado spin-off de “Alan Wake”, “American Nightmare”.
Título Original: Quantum Break | Género: Acción / Thriller / Ciencia Ficción | Nacionalidad: Finlandia | Director: Stobe Harju | Actores: Shawn Ashmore, Aidan Gillen, Dominic Monaghan | Productor: – | Guión: Sam Lake, Tyler Burton Smith, Cam Rogers, Ross Berger | Música: Petri Alanko | Plataforma: Xbox One, PC | Desarrollador: Remedy Entertainment, Microsoft Studios
Sinopsis: Como consecuencia de una fracción de segundo de destrucción que resquebrajó el mismísimo tiempo, dos hombres descubren que han cambiado y que obtuvieron poderes extraordinarios. Uno de ellos puede viajar en el tiempo y pondrá todo lo que está a su disposición por controlar este poder. El otro usará sus nuevas habilidades para intentar derrotar al primero y reparar el tiempo antes de que se desgarre por completo. Ambos enfrentarán enormes obstáculos y tendrán que tomar decisiones dramáticas que determinarán el futuro.
Última partida: 25/09/2016 (Xbox One S)