San Andrés (2015)
Paseos en helicóptero.
Cuando Irwin Allen y Jennings Lang producían sus pantagruélicas películas catastróficas, rellenaban los huecos (los socavones) en el guión con un plantel de estrellas que competían directamente con terremotos, siniestros de barcos y aviones, riadas, volcanes y gigantescos edificios en llamas. Aquel cine setentero, de eminente esencia lúdico-festiva, trataba de sorprender al espectador con imágenes extraordinarias de destrucción salvaje y masiva, sustentadas por unos intérpretes resultones que peleaban con situaciones y diálogos imposibles.
En “San Andrés” Brad Peyton cuenta con un guión chirriante, un rescate familiar alargado hasta el absurdo y un protagonista limitadísimo (Dwayne Johnson); piloto de rescate que se dedica a mangar vehículos para hacer avanzar una trama que invita al sonrojo en numerosas situaciones. Mientras tanto, lógicamente, todo se destruye a su alrededor. Del helicóptero que esquiva rascacielos que se desploman como fichas de dominó, a la furgoneta que serpentea entre enormes fallas que horadan las tierras californianas, para terminar montados en una lancha fueraborda que desafía a todo un señor tsunami; más grande, más rápido, ahora, ya.
Pero no sería justo destripar esta cinta atendiendo únicamente a su increíble y megalómana sucesión de set-pieces de escala creciente y asombro menguante. Aquí lo verdaderamente deplorable es la falta de dinamismo, la previsibilidad irritante del conjunto, el desbordado reciclaje de elementos ya canibalizados en el “2012” de Roland Emmerich… Lo inaguantable de “San Andrés” es el esperpento que supone alargar unas secuencias de acción insoportables y tediosas, diseñadas para introducir en pantalla aún más minutos de asfixiantes CGIs. Tampoco podemos olvidar la lección mema de sismología de la mano del experto de turno (diseñador de un inoperante modelo de predicción de seísmos), interpretado por un cargante Paul Giamatti.
El despropósito es mayúsculo, tanto que genera cierta añoranza por ese segundo advenimiento del cine de destrucción que se produjo en los años noventa, con títulos como “Un Pueblo Llamado Dante´s Peak”, “Pánico en el Túnel” o “Twister”. Este nuevo cine catastrófico ha perdido la simpatía que destilaban aquellos films pretéritos. Qué queréis que os diga, mucho mejor Charlton Heston circulando por Los Ángeles en su Chevy K5 Blazer durante el “Terremoto” de Mark Robson.
Manu Castro
@ManuCastroLSO
(22-12-2015)
• Lo mejor: Se rompen muchos cristales, y eso puede ser moderadamente divertido.
• Lo peor: No hay personajes, la trama nula. El efecto sorpresa se agota rápido.
Título Original: San Andreas | Género: Acción / Drama / Thriller | Nacionalidad: USA / Australia | Director: Brad Peyton | Actores: Dwayne Johnson, Carla Gugino, Alexandra Daddario | Productor: Bruce Berman, Richard Brener, Beau Flynn | Guión: Carlton Cuse, Andre Fabrizio, Jeremy Passmore | Fotografía: Steve Yedlin | Música: Andrew Lockington | Montaje: Bob Ducsay
Sinopsis: Después de que la falla de San Andrés finalmente ceda y desencadene un terremoto de magnitud 9 en California, un piloto de helicóptero de búsqueda y rescate (Dwayne Johnson) y su ex mujer deciden ir juntos de Los Ángeles a San Francisco para salvar a su hija. Sin embargo, este peligroso viaje hacia el norte es sólo el principio, y cuando creen que lo peor ya ha pasado… en realidad sólo acaba de empezar.
Fecha de estreno: 26 de junio de 2015 (España)
Presupuesto: 110,000,000 $
Recaudación primer fin de semana USA: 54,588,173 $ (31 de mayo de 2015)
Recaudación total USA: 155,190,832 $
Recaudación total mundial: 473,990,832 $
Compañías: New Line Cinema, Village Roadshow Pictures, RatPac-Dune Entertainment
Duración: 114 min.
Mezcla de sonido: Dolby Digital | Datasat | Dolby Atmos
Color: Color
Relación de aspecto: 2.39:1
Último visionado: 07/01/2020 (4K) | 01/12/2023 (Blu-Ray)