Green Room (2015)
Auténticos nazis de mierda.
Las malas decisiones y las coincidencias cabronas de las que se sirve Jeremy Saulnier para establecer el conflicto de su nuevo film, nos introducen –de una hostia– en la sordidez de un local regentado por un puñado de energúmenos pelones. La banda de punk alternativo entra por su propia voluntad en el cubil de la bestia. Huele chungo desde el principio, pero nosotros, espectadores atrevidos, aceptamos la invitación a una trampa absorbente. Quiere la providencia, por una puñetera casualidad (por la ligereza en el uso de un pestillo), que nos veamos abocados a un asfixiante y aterrador encierro en la habitación verde –uno de esos recónditos lugares alejados de los ojos del mundo– junto a unos pringados de categoría. Experimentaremos la crudeza.
“Green Room” es una película cañera, más de lo esperado; un survival claustrofóbico e hiperrealista que nos obliga a tragar (mucha) saliva. Reclusión forzosa a lo Carpenter –con aroma a las asediadas estancias de “Asalto a la Comisaría del Distrito 13”–, como si los zombies de Romero llevaran esvásticas y la cabeza rapada, mientras tratan de atravesar una puerta reforzada por el instinto de supervivencia de un carismático quinteto de memos. Sobredosis de tensión malsana, sudores de terror, desesperación y miedo. Saulnier exprime con brillantez una situación de cagarse encima, primero desde la óptica de las víctimas con “ciertos recursos”, para salir después de la habitación y obligarnos a observar la locura y violencia desatada de la peor escoria de la humanidad: un grupo organizado de fanáticos desprovisto de escrúpulo alguno. Citando a Walter Sobchak: “Putos nazis, Nota”.
Manu Castro
@ManuCastroLSO
(29-07-2016)
• Lo mejor: Patrick Stewart. El perfecto mecanismo que precipita los acontecimientos. La serenidad de su mutación final en película de venganza.
• Lo peor: Alguna escena un tanto inverosímil.
Título Original: Green Room | Género: Terror | Nacionalidad: USA | Director: Jeremy Saulnier | Actores: Anton Yelchin, Imogen Poots, Alia Shawkat | Productor: Neil Kopp, Victor Moyers, Anish Savjani | Guión: Jeremy Saulnier | Fotografía: Sean Porter | Música: Brooke Blair, Will Blair | Montaje: Julia Bloch
Sinopsis: Tras presenciar un asesinato en un bar, los miembros de una banda de música punk son encerrados en una habitación del local por los autores del homicidio: una pandilla aterradora de neonazis que reivindican la supremacía blanca. Su líder es el dueño del bar (Patrick Stewart), un tipo que no quiere dejar testigos de lo sucedido.
Último visionado:
Me encantó que me sorprendieran con alguna que otra muerte tempranera y que la trama, en su mayoría, se desarrollase casi como una obra de teatro: en el camerino, con sus idas y venidas, entrando y saliendo personajes, centrándose más en las actuaciones que en crear efectos…
Pero sigo diciendo que el tramo final no me convence
Le falta algo de valentía a la hora de solucionar el conflicto. En circunstancias normales de esa habitación no sale nadie con vida.